jueves, 19 de noviembre de 2015

No puedo olvidar tu rostro

Justamente al terminar de leer La princesa de hielo, de Camilla Läckberg, tuvimos una reunión de amigos y les recomendé su lectura. Y una de mis amigas me dijo que si me gustaban las historias de misterio, que leyera No puedo olvidar tu rostro, de Mary Higgins Clark. Este género narrativo no es precisamente de mi devoción, pero como resultaba que este libro lo tenía en casa, me lo apunté. Fue un regalo que me hizo mi cuñada hace ya varios años.
Así, he estado entretenido estas últimas semanas con sus páginas. Comienza planteando una situación enigmática interesante, pero poco a poco se va llenando de diferentes historias cruzadas y de muchos personajes secundarios que despistan bastante. Cuando todo este engranaje va tomando forma, el misterio inicial se queda en un segundo plano y todo se centra en cuestiones de luchas de poder por parte de las instituciones de justicia. Jueces, fiscales y abogados procuran mantener sus estructuras y sus posiciones políticas, aún a costa de que precisamente no sea la justicia lo que prevalezca.  

domingo, 8 de noviembre de 2015

El lenguaje proverbial

1. Concepto e introducción
Uno de los rasgos específicos del código restringido es el uso frecuente de refranes. Podemos definir refrán como frase completa e independiente que expresa de manera sentenciosa un pensamiento de carácter didáctico o moral, generalmente aceptado como indiscutible por la comunidad de hablantes que lo usa. Su uso, facilitado por la fórmula fija e invariable que permite memorizarlos sin esfuerzo, impide la expresión personal, original, individualizada (ahorra esfuerzo idiomático y, por tanto, mental). Al igual que las comparaciones tópicas (listo como un lince), las metáforas excesivamente repetidas (no tiene muchas luces) y otras fórmulas rimadas (ni chicha ni limoná), tienden a uniformar el lenguaje, impiden la creación personal de oraciones o pensamientos originales. Son, por tanto, recursos que empobrecen la expresión, propios del código restringido y poco habituales en el elaborado. Su medio de transmisión es, generalmente, la lengua oral.
En la literatura, los refranes aparecen como elementos caracterizadores del habla de los personajes populares. Dos casos específicamente significativos en este sentido son la Celestina y Sancho Panza. En ambos casos, los respectivos autores contrastan el lenguaje vulgar de siervos y criados con el código elaborado utilizado por los señores, especialmente Calisto y Don Quijote, que a su condición social unen su afición literaria.


En la actualidad, el uso de refranes sufre un retroceso apreciable, sobre todo entre los más jóvenes, aunque no provocado por un enriquecimiento del nivel expresivo, sino por su sustitución por otro tipo de fórmulas con menos sabor arcaico o rural.


2. Características del lenguaje proverbial
Existe en español una gran cantidad de refranes, que presentan algunas características comunes:
- Sentido figurado, es decir, aparte de su significado literal, denotativo, el oyente extrae una significación aplicable a circunstancias habituales de la vida. Por ejemplo, "Más vale pájaro en mano que ciento volando", no tiene para nosotros sentido por su referencia a las aves, sino por la enseñanza que se deduce de ello: es mejor lo seguro, aunque escaso, que lo posible, por abundante o tentador que resulte.
- Estructura mimembre, con dos partes bien diferenciadas por la entonación , con ritmo muy marcado que facilita la memorización. Abundan los elementos correlativos y los paralelismos.
- Rima consonante o asonante, ritmo producido por repeticiones de todo tipo (fónicas, léxicas).
- Brevedad; en muchas ocasiones ni siquiera se enuncia entero, por su carácter consabido.
- Elipsis de algunos elementos, como el verbo, el artículo, etc. Ejemplo: "Perro ladrador, poco mordedor".
- Entonación autónoma dentro del discurso, son como un aparte explicativo dentro de la conversación.
- Arcaísmos; por su pertenencia al folclore, a la "sabiduría popular" de una comunidad, perviven a través de los siglos, por lo que a veces presentan palabras que ya no son de uso común. Ejemplo: "En los nidos de antaño, no hay pájaros hogaño".