martes, 20 de septiembre de 2011

Los tropos y las figuras más comunes

Tropos

Metáfora: Se produce cuando las cualidades de un objeto real (A) se identifican con las de un objeto irreal (B).

La guitarra es un pozo
con viento en vez de agua.
Gerardo Diego

El término real (A) puede desaparecer. En este caso: "El pozo con viento" = "guitarra". La metáfora es, además, reversible: "La guitarra de agua" = "pozo".

Metonimia: Consiste en dar la causa por el efecto o el continente por el contenido: "compró un Cervantes" (por "compró un libro de Cervantes").

Sinécdoque: Consiste en la sustitución del todo por la parte o la parte por el todo: "tomó el acero" (por "tomó la espada").

Hipérbole: Es una exageración.

Si nos acercamos a un sepulcro gótico observaremos los enormes ríos de figurillas graciosas.
Federico García Lorca

Ironía: Se produce cuando el significado de lo que se dice es contrario de lo que se pretende decir. Depende del tono y del contexto.

En la página 122, el doctor Castro ha enumerado algunos escritores cuyo estilo es correcto; a pesar de la inclusión de mi nombre en este catálogo, no me creo del todo incapacitado para hablar de estilística.
Jorge Luis Borges

Alegoría: Es una metáfora continuada, cuyo sentido puede quedar oculto. En el ejemplo se trata del recuerdo de un primer amor perdido:

Yo iba perdido por la selva oscura,
sólo oía el quebrar de una cadena,
y vi encenderse con medrosa albura,
en la selva, una luz de ánima en pena.
Tuve conciencia. Vi la sombra mía,
negra, sobre el camino de la muerte,
y vi tu sombra blanca que decía
su oración a los tigres de mi suerte.
Ramón del Valle-Inclán

Símbolo: Se produce cuando una palabra deja de tener su significado habitual para pasar a tener otro totalmente distinto.

De flores y esmeraldas
en las frescas mañanas escogidas,
haremos las guirnaldas...
San Juan de la Cruz

Comenta el autor: "...las flores son las virtudes del alma, y las esmeraldas los dones de Dios".

Perífrasis: Consiste en decir con varias palabras lo que podría decirse con la palabra o las palabras precisas. Por ejemplo, Rubén Darío, que había escrito Azul y Prosas profanas, se presenta así:

Yo soy aquel que ayer no más decía
el verso azul y la canción profana.

Figuras de dicción

Pleonasmo: Es la adición de palabras que refuerzan una idea sin añadir nada nuevo:

¡Qué persuasión fuera bastante para persuadirme
que hay monos en el mundo que adivinen, como
lo he visto ahora con mis propios ojos!
Cervantes

Anáfora: Es la repetición de una o varias palabras al principio de un verso:

La yacente no sabe.
Se puede tener unos brazos abandonados.
Se puede tener unos oídos pálidos
que no se apliquen a la corteza ya muda.
Se puede aplicar la boca a lo irremediable.
Se puede sollozar sobre el mundo ignorante.
Vicente Aleixandre

Paronomasia: Consiste en la proximidad de palabras parecidas pero de significados distintos:

La verdad padece, pero perece.
Santa Teresa de Jesús

Aliteración: Es la repetición de fonemas en distintas palabras próximas:

¡Qué desdenes rudos lanza bajo el ala,
bajo el ala aleve del leve abanico!
Rubén Darío

Quiasmo o retruécano: Se produce cuando una frase está formada por las mismas palabras que la antecedente, pero con orden inverso:

¿No ha de haber un espíritu valiente?
¿Siempre se ha de sentir lo que se dice?
¿Nunca se ha de decir lo que se siente?
Francisco de Quevedo

Epíteto: Es cualquier adjetivo que posee un valor estilístico. El más frecuente es el que pone de relieve las cualidades propias del sustantivo:

Cual queda el blanco cisne cuando pierde
la dulce vida entre la hierba verde.
Garcilaso

Polisíndeton: Consiste en repetir las conjunciones coordinantes en cada miembro de una enumeración. Véase este ejemplo donde la figura realza el esfuerzo de ascender a la cumbre del monte:

Alarga el bien guiado
paso, y la cuesta vence, y, solo, gana
la cuesta del collado;
y do más pura mana
la fuente, satisfaz tu ardiente gana.
Fray Luis de León

Asíndeton: Consiste en suprimir los enlaces. Un ejemplo famoso es la célebre frase de César:

Llegué, vi, vencí.

Elipsis: Es la omisión de expresiones que son exigidas por la gramática y la lógica, pero no son imprescindibles para que se mantenga el sentido:

Lo bueno, si breve, dos veces bueno.
Baltasar Gracián

Zeugma: Es la elipsis de un antecedente. Fue figura muy grata en el Siglo de Oro. El ejemplo más notable es el de Cervantes, que incluso llega a separar con un epígrafe el antecedente -le dejó ir a la buena hora- y el consecuente -La del alba sería, cuando don Quijote-.

Hipérbaton: Consiste en alterar el orden sintáctico. El más frecuente y más extremo es el de la separación del sustantivo y adjetivo o complemento con preposición. Véase esta burla de Quevedo contra los hipérbatos gongorinos, donde llega a separar la palabra gerigonza:

Quien quisiere ser culto en solo un día
la geri aprenderá gonza siguiente.
Francisco de Quevedo

Figuras de sentencia

Apóstrofe: Es la interrupción de un discurso para dirigirse con vehemencia hacia alguien o algún objeto presente o ausente:

Hacia Madrid, una noche,
va el tren por el Guadarrama.
En el cielo, el arco iris
que hacen la luna y el agua.
¡Oh, luna de abril serena
que empuja las nubes blancas!
Antonio Machado

Oxímoron: Es la figura que presenta dos términos en aparente contradicción:

Respóndate, retórico, el silencio.
Calderón de la Barca

Evidencia: Es la descripción vivaz y detallada de un objeto u acción:

Abrió una gaveta de donde sacó el pagaré de doña Mariquita. Tomándolo por una punta con dos dedos lo acercó al hocico de la vieja, quien, con los ojos entornados, fingiéndose accidentada, espiaba entre la celosía de las pestañas el ir y venir de Tigre Juan. Pronto la vieja puso ojos de ternera, redondos y estúpidos, al ver que Tigre Juan encendía un mixto, aplicaba fuego al pagaré, lo dejaba arder hasta quemarse las yemas y, al final, soplando, diseminó en el aire las pavesas del carbonizado papel.
Ramón Pérez de Ayala