martes, 12 de agosto de 2014

Los recuerdos

El pasado día 16 de julio, para celebrar el santo de mi hija, me fui con ella a pasar el día juntos a Sevilla, para comer, dar un paseo y visitar las librerías. Tengo la suerte de compartir con mi hija el gusto por la lectura. Un regalo para su santo era un libro, así que ella miraba y miraba, y claro está, yo terminé también curioseando. Cada vez me voy más convencido a los libros de bolsillo, ya no sólo por cuestión económica, sino también por ser más manejables, más ligeros.
Y encontré Los recuerdos, de David Foenkinos. Ya lo tenía yo en lista desde hacía tiempo, no sé bien por qué. Imagino que habría leído su reseña en alguna parte.
Hoy lo he terminado de leer. Lo recomiendo, indiscutiblemente. Es emotivo, divertido, escrito de modo muy bonito. La historia es sencilla y tan cercana a la vida cotidiana, que enseguida te reconoces en lo que cuenta. Hay tantos detalles entrañables de la cotidianeidad de los personajes, que te mueves permanentemente entre la melancolía y la añoranza de tus propios recuerdos, y la ficción de lo que lees. Por otro lado, me ha encantado la metáfora de la huida para encontrar la felicidad y la vuelta al pasado para revivir la felicidad de los recuerdos.
Y me quedo con la visita de Denise, la abuela del protagonista, a su escuela de cuando era niña, para terminar la clase que dejó interrumpida.